Destacada participación de Arie Gelfenstein en el evento financiero.

Hubo un momento en que Arie Gelfenstein no pudo ser más directo y premonitorio en su exposición sobre la Ley Fintech, en el encuentro Rankia Markets Experience, el sábado 5 de julio. Ante una audiencia de cerca de 500 personas, el director ejecutivo de la ACHAI lanzó lo que parecía un ejemplo coloquial sobre la importancia de la normativa entregada por la CMF, pero que tendría sorprendentes repercusiones al día siguiente.

“Si inviertes en un lugar que no está regulado y se produce una estafa, no puedes ir al día siguiente a reclamarle a la CMF. ¿Sabes que te dirá? Usted invirtió en un lugar que no está regulado y nosotros no podemos hacer nada”, describió en su alocución.

Justo el domingo se dio a conocer una estafa piramidal en un sitio que operaba a través de whatsapp y que prometía las mejores rentabilidades, dejando un gran número de personas afectadas.

Días después, la situación fue más contundente, ya que la CMF entregó una lista más amplia al Ministerio Público, con 8 entidades que, aparentando ser reguladas, solicitan pagos previos para acceder a préstamos que posteriormente no son entregados

El valor de inscribirse y cumplir con las reglas en el área de los asesores independientes específicamente, y en las otras áreas que caben en la actividad, fue el tema que presentó con todas sus aristas Gelfenstein, ante un público amplio de emprendedores y gente interesada en las finanzas, cuya media no superaba los 40 años.

La participación tuvo un gran impacto desde el inicio, porque el director de la ACHAI advirtió que había algo que no cuadraba y a eso le sacó provecho. En un sábado en el que todo el mundo estaba vestido informalmente, él era el único que llegó con traje.

“Bueno, como ustedes ven, vengo formal. Y es por una razón muy simple. Veo mucha juventud, que cuenta sus experiencias, con éxito, pero no todo es informalidad. Aquí tiene que haber cierta formalidad y cumplir con los aspectos normativos que entrega la CMF es esencial. Y si ustedes quieren dormir bien en la noche, no pueden estar metiendo su platita en cualquier parte”.

Los asistentes, un grupo amplio que incluía influencers y gente ligada a la tecnología, entre otros, tomaron con entusiasmo el tema y llenaron de consultas al expositor.

“Fue un mensaje a las nuevas generaciones. Yo soy muy entusiasta con la innovación, con la llegada de la tecnología y del emprendimiento, lo cual exige también apegarse a las normas vigentes”, explicó.

Cuánto había impactado el tema se vio en la exposición que siguió a la de Gelfenstein.

“Subió una empresa que estaba dedicada a las criptomonedas y lo primero que advirtió su expositor fue: Sí cumplimos con las reglas, sí estamos inscritos en la CMF. Fue un respaldo a nuestro mensaje y yo lo celebro”, finalizó.